Una fuerte medida judicial puso este viernes a Wanda Nara en el centro de la escena. La Justicia autorizó a la Policía a ingresar por la fuerza a su domicilio del barrio de Núñez, en Buenos Aires, si no entrega a sus hijas a Mauro Icardi, tal como se había dispuesto en una resolución emitida el día anterior.

La revinculación entre el futbolista y las niñas debía concretarse a las 11 de la mañana, pero al no cumplirse en el horario previsto, el juez intimó a la mediática a acatar la orden de inmediato. En caso de negativa, se habilitó la intervención de personal policial femenino no uniformado, con facultades para ingresar a la vivienda incluso forzando cerraduras.

Mientras la situación se mantiene en desarrollo, crece la expectativa en el edificio Chateau Libertador, donde reside Wanda, con medios apostados en la puerta y un clima de tensión entre vecinos y allegados.