Lowrdez Fernández, exintegrante del grupo Bandana, volvió a ocupar los titulares tras conocerse que quedó sin custodia policial en su domicilio de Villa Crespo, luego de declarar ante la Justicia a favor de su expareja, Leandro García Gómez, quien había sido detenido días atrás por denuncias vinculadas a presuntos episodios de violencia y amenazas.

Durante ese período, Lowrdez se mantuvo resguardada en la casa de un amigo y bajo vigilancia policial, hasta que este lunes se dispuso el retiro oficial de los agentes. Según trascendió en un programa televisivo que mostró las imágenes del operativo, la artista aseguró que no fue raptada ni sufrió maltratos, aunque testigos sostienen que declaró bajo presión, ya que habría recibido amenazas directas: “Él me dijo que me iba a mandar a matar si declaraba algo en su contra”.

El caso generó una fuerte repercusión mediática y social, no solo por la exposición pública de la cantante, sino también por el historial conflictivo con su ex pareja y las denuncias previas por violencia de género. Diversos especialistas y periodistas cuestionaron la decisión judicial de retirar la custodia y advirtieron sobre los riesgos para la seguridad de Lowrdez ante la posible liberación del acusado. El tema, que reabrió el debate sobre la eficacia de los protocolos de protección a víctimas, motivó además una ola de testimonios de mujeres que relataron experiencias similares en redes y medios de comunicación.