Murió el paciente tratado con dióxido de cloro: ¿hubo mala praxis judicial?

Un fallo judicial exigía que se le administrara dióxido de cloro a un paciente con coronavirus, pero el sanatorio Otamendi, lugar donde se encontraba internado, se negó a hacerlo y la sustancia fue administrada por un neurocirujano personal externo a la clínica. Horas más tarde, el paciente falleció. Ahora la familia demanda al sanatorio por homicidio culposo y desobediencia.

Sobre el caso, Eduardo Battaglia detalló: "El juez federal Javier Pico Terraro determinó que se le administrara la sustancia al paciente porque consideró que no le ocasionaría un grave perjuicio y evitaría el agravamiento de las condiciones de vida del paciente. En esa línea, determinó que el sanatorio deberá garantizar el tratamiento prescripto por el médico tratante neurocirujano Dante Converti. (...) El dióxido de cloro es una sustancia no autorizada por ANMAT y que no es un medicamento".

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